Los residuos sanitarios no específicos son todos aquellos materiales que se desechan de las actividades desempeñadas en los centros asistenciales: como clínicas, hospitales, laboratorios y centros veterinarios; los cuales representan un peligro para la salud de las personas. Es por ello que deben ser gestionados de una forma específica para minimizar ese peligro.

Esto quiere decir que los residuos sanitarios no específicos no pueden ser tratados de la misma forma como se tratan otros desechos, pues un error en su manipulación (tanto dentro como fuera de los centros asistenciales y laboratorios), podrían desencadenar problemas de salud pública, contaminando a todos las personas que entren en contacto con ellos.

Todos los residuos sanitarios no específicos poseen una categorización que facilita el proceso de almacenamiento una vez que han sido utilizados. Una clasificación que debe estar especificada en el protocolo para el tratamiento de material de desecho de origen hospitalario del centro asistencial. De esa forma se mantiene un orden adecuado y se evita la posibilidad de que se mezclen sustancias incompatibles o altamente peligrosas.

¿Cuáles son los residuos sanitarios más comunes?

En todos los centros asistenciales y laboratorios clínicos se desechan diversos materiales que han estado en contacto con fluidos o tejidos corporales humanos o de origen animal (en las veterinarias), entre ellos los que más destacan son:

  • Ropa, sábanas, centros de cama, yesos, gasas, algodón, vendas, guantes, gorros, pañales, entre otros.
  • Kit de hemodiálisis, jeringas, catéter, vacunas, elementos de cultivo y experimentación con microorganismos, tejidos extraídos en cirugías, entre otros.
  • Sustancias químicas y radiactivas.
  • Termómetros, reactivos, pilas, lubricantes, medicamentos, aceites, entre otros.

¿Por qué es tan importante el tratamiento específico de residuos sanitarios no específicos?

La correcta manipulación y tratamiento de estos materiales de desecho de origen hospitalario garantiza el bienestar de todos los pacientes y trabajadores de dichos centros, pues cualquiera de ellos puede estar contaminado con sustancias tóxicas o infecciosas. Incluso algunos residuos de estos pueden también provocar contaminación de índole ambiental.

Por ello es tan importante su manipulación correcta, así como la contratación de una empresa de gestión de residuos que se encargue de recoger, transportar, almacenar y eliminar cualquier desecho tanto peligroso como inofensivo.

¿Cómo se hace la gestión de residuos sanitarios?

Los materiales de desecho de los diversos centros asistenciales pasan por diversos procesos de manipulación, tanto a escala interna como externa, para que el proceso de gestión de residuos sanitarios sea el adecuado. Estos consisten en:

Manipulación interna

Una vez que se descarta algún material médico-quirúrgico ya se convierte en un residuo, razón por la cual la gestión de éste comienza dentro del centro asistencial, donde debe recogerse, envasarse en un recipiente adecuado y transportarse de forma segura hasta el lugar de almacenamiento.

En el lugar destinado para su almacenamiento los residuos pueden durar un tiempo determinado, dependiendo de su naturaleza. Por ejemplo, los reactivos, los aceites y otros líquidos pueden permanecer seis meses; mientras que los procedentes de actividades de índole quirúrgica pueden durar sólo una semana.

En este sentido, es importante cumplir con las normas establecidas en el protocolo para el tratamiento de desechos del centro asistencial, con el objetivo de evitar la mezcla de sustancias de desecho que puedan desencadenar un foco de contaminación interno. Del mismo modo el almacenamiento de todo el material quirúrgico: como agujas y tubos de ensayo con sus respectivas tapas y tapones de seguridad.

No todas las personas que trabajan en un hospital, laboratorio o clínica veterinaria pueden manipular el material médico-quirúrgico que se descarta, pues para ello debe existir un equipo capacitado que lleve a cabo las acciones de recolección y almacenamiento de forma adecuada. El objetivo es garantizar el bienestar de los pacientes y todos los trabajadores.

Manipulación externa

En el caso de las empresas de gestión de residuos, desde SMV asesoramos al hospital, laboratorio o veterinaria con la vestimenta y el equipo de seguridad adecuado como guantes y mascarillas. Recogemos en el lugar de almacenamiento el material a desechar -el cual debe estar debidamente clasificado según el tipo de residuo-, lo trasladamos hasta el vehículo/contenedor y lo llevamos a la planta de tratamiento.

Una vez que llegan a la planta lo almacenamos y, posteriormente, pasan por diversos procesos químicos y físicos (según el tipo de material), como la aplicación de calor húmedo, calor seco, radiación, microondas e incineración hasta ser eliminados completamente. Todo ello cumpliendo con los respectivos estándares ambientales, de seguridad y calidad.

Es importante contratar los servicios de una empresa de gestión de residuos no específicos que cuente con el equipo y personal calificado necesario para realizar la manipulación de todos los materiales médicos y quirúrgicos que se desechan en todos los centros asistenciales. En SMV estamos capacitados para realizar la gestión de residuos sanitarios no específicos de manera segura y efectiva. ¡Contáctanos y garantiza el bienestar de las personas y la conservación del medio ambiente!