Reciclar colchones es fundamental. Se calcula que en España se tiran anualmente 16 millones de colchones. Este grave problema afecta al medio ambiente.

Se calcula que el 80 % de todos los colchones van a parar a vertederos de basura, lo que dificulta su reciclaje e implica una verdadera complicación, por el volumen que tienen y por las toneladas de espuma en desuso.

Gracias al reciclaje, es posible dar una segunda vida a un colchón y a todos los elementos que lo conforman, ya que el 90 % de los componentes de un colchón son completamente reciclables.

En SMV somos conscientes de la importancia del reciclaje de los colchones, por eso desde el 2012 contamos con una línea de servicios que se encarga de este proceso.

 

La problemática de tirar colchones

Para los encargados de los vertederos de basura, maniobrar con los cientos de colchones que llegan diariamente es un problema importante: los colchones se doblan, no se compactan y son inflamables, especialmente por los espacios con aire que generan y los materiales que lo componen.

Otro problema es que muchos colchones no llegan a los vertederos, sino que son abandonados en la vía pública, y dado que los colchones atraen roedores, insectos y alimañas que se convierten en plagas, los problemas de salud a las comunidades son evidentes . Además, aumenta el riesgo de incendios, inundación y erosión.

Todos estos efectos negativos se mitigan al reciclar colchones, dado que se hace un mejor uso de este residuo voluminoso y de sus componentes.

 

El proceso de reciclaje

Las empresas de gestión de residuos que se encargan de recolectar, transportar y reciclar colchones utilizan métodos industriales para esto.

Lo primero que hacen es abrir con una sierra cada colchón, con cuidado de no romper ningún componente, para poder separar los distintos elementos que lo conforman.

De esta forma, se separa el poliuretano, la armadura de madera, los fuelles metálicos y la tela que los forra, para que cada material sea procesado de forma separada y reciclado para fabricar nuevos elementos.

 

Otra vida a sus componentes

Aproximadamente el 90 % de los materiales con los que está fabricado un colchón son reutilizables y reciclables. Al reciclar colchones se pueden recuperar materias primas como:

  • El poliuretano, ”la esponja”, se puede desmenuzar mecánicamente para fabricar relleno, aislantes o para la elaboración de subproductos mediante la compactación con adhesivo.
  • La madera se utiliza para hacer astillas y usarlas en calefacción, serrín, virutas para el cuidado de animales, así como también para fabricar tablones de aglomerado.
  • Los resortes de metal pueden fundirse y entrar al mercado de materias primas como material reciclado..
  • La tela que lo recubre se reutiliza para fabricar textiles de bajo nivel, también se utiliza para generar electricidad en la industria de biocombustibles.

 

La vida útil de un colchón

Existen diversidad de marcas, modelos y tipos de colchones, por lo que definir el periodo que transcurre entre la producción de un colchón y el punto en el cual pierde sus cualidades es una tarea complicada.

Su duración depende principalmente de las condiciones ambientales, las características físicas de quien lo utiliza, la frecuencia con la que se utiliza y la calidad del material con el que está hecho.

Antes de tirar un colchón es prudente detenerse a pensar si se ha deformado o hundido, si está afectando el descanso por molestias físicas o si quien lo utiliza ha sufrido cambios corporales. No solo mirar el tiempo que tiene en uso, debido a que regularmente duran 10 años en promedio, pero esto no determina su estado.

 

Importancia de reciclar colchones

En los 15 que llevamos dedicados a esta línea de gestión de residuos en SMV hemos reciclado más de 320.000 colchones.

Gracias al reciclaje de colchones se obtienen diversos beneficios, entre los que destacan los siguientes:

  • Se disminuye la basura voluminosa tanto en los vertederos como en las vías públicas, lo que trae como consecuencia disminución de riesgos a la salud y de incendios.
  • Se evita la contaminación y sus efectos negativos sobre el medio ambiente.

 

  • Se promueve el desarrollo sostenible y la óptima utilización de los recursos, ya que todos los materiales que conforman un colchón pueden reutilizarse para fabricar nuevos elementos.
  • Se abren nuevas oportunidades de empleo para quienes se encargan del reciclaje de los colchones.

 

Por todo esto, evalúa la vida útil de tus colchones antes de sustituirlos, y cuando llegue el momento de hacerlo garantiza que sean entregados a un gestor de residuos autorizado, para que así tú también estés contribuyendo con el reciclaje.